sábado, 14 de marzo de 2015

Las bodas de antaño en Jamilena

Otra vez, traemos a colación el interesante legado del maestro y antiguo alcalde Jamilena, D. Rafael Castellano Pérez, quien tras su jubilación realizó una extraordinaria labor de recopilación de datos en los archivos históricos y en la memoria de las personas mayores de Jamilena.

Hoy traemos a colación el apartado de las bodas, ya que al iniciarse la primavera, comienzan los días en que muchos vecinos de Jamilena deciden contraer matrimonio aprovechando el buen tiempo de los meses primaverales y estivales. ¿Qué recogía D. Rafael Castellano en sus escritos o memorias a propósito de las bodas que se celebraban antaño en Jamilena? Veamos sus palabras:




LAS BODAS, por D. Rafael Castellano Pérez

"Todo el pueblo participaba en estas hermosísimas e incomparables ceremonias. Con qué mimo preparaban las madres el ajuar de sus hijas. De pequeñas ya empezaban a guardar cosas con tal fin. Son dignas de leerse las cartas-dote que firmaban las parejas
medianamente desahogadas. Hoy no es costumbre, pero qué ajuares, qué pisos, qué vestidos, qué fiesta se organiza. Ya digo que participa todo el pueblo. Desde que sale la novia del brazo del compadre seguida del novio que da el suyo a la comadre, desde la casa de ella hasta la Iglesia han de pasar por entre una doble fila de paisanos que así muestran su admiración por los nuevos desposados. Van a continuación los numerosísimos invitados, luego, a la salida, las vivas a los novios, y al lugar del refrigerio. Y allí son invitados con largueza, y al final los regalos en metálico a la joven pareja. En definitiva lo que hacen es reembolsar lo que ellos y sus familiares dieron a otros. Y así tiene para empezar a vivir dignamente. En la antigüedad eran muchos los que por distintas causas se llevaban la novia y ya no podían levantar cabeza. Y lo peor era que lo hacían parejas más jóvenes de lo conveniente y al marchar él a Servicio la dejaban con un hijo ó más, y a veces en estado. Así se instaló la tuberculosis en muchas familias. Hoy gracias a Dios se ha superado esta lacra. Se alimentan mejor. Viven bien. Y luego el baile".